Sin duda las protestas en contra de la brutalidad policial han impactado a la sociedad estadounidense. Tanto, que se consolidó un movimiento llamado Black Lives Matter (BLM).
No obstante, muchos no están de acuerdo con los preceptos del BLM, por lo que surgió el All Lives Matter (ALM). En simples palabras, el slogan busca darle importancia a todas las vidas sin importar el color de la raza.
Esta respuesta al BLM incluso ha sido respaldada por celebridades y personalidades como Chris Brown, Jennifer López, Terry Crews, Donald Trump, entre otros.
Por otro lado, el minorista Walmart vendía mercancía que llevaba estampada «All Lives Matter» pero luego de una reacción en redes sociales, decidió ponerle fin a la venta.
En un comunicado, la compañía dijo: “Fundamentalmente creemos que todas las vidas son importantes y que cada individuo merece respeto. Sin embargo, mientras escuchamos, llegamos a comprender que la forma en que algunas personas, pero no todas, utilizan la frase «All Lives Matter» en el entorno actual minimiza intencionalmente el enfoque en la dolorosa realidad de la desigualdad racial».
Las reacciones hacia el «All Lives Matter» se basan en afirmar que se trata de un grupo de blancos que defienden su raza pese a que diversos afroamericanos también han apoyado el ALM. Para los defensores del BLM, no es que las vidas negras importen más. Se trata de que también importan.
Esta diferencia ha generado acalorados debates, donde los adeptos del BLM afirman que su movimiento no pretende darle preferencias a su raza sin motivo alguno. Pues para ellos, la raíz del problema es el «privilegio blanco».
De acuerdo a un ensayo publicado en 1988, se define como una ventaja invisible que solo beneficia a las personas de un color de piel en especial.
La autora describe situaciones del día a día para demostrar tal teoría. Desde poder entrar a una tienda y descubrir que productos como champú y pantimedias estaban dirigidas a su tipo de cabello y tono de piel. Encender la televisión y ver a personas de tu raza ampliamente representadas.
Esas interpretaciones eclipsan los orígenes del denominado privilegio blanco, así como su capacidad para influir en las decisiones sistémicas. Sombrean el hecho de que es tanto un legado como una causa de racismo.
Por eso los defensores del BLM alegan que contradecir su causa además de ser racista, es producto de la ignorancia, según un texto publicado en el sitio web Cleveland.com.
«La diferencia con Black Lives Matter es que obliga a algunos a admitir una verdad incómoda. Si bien todas las vidas deberían importar, las vidas negras han sido ignoradas una y otra vez», dicen los autores del artículo.
Opiniones como estas abundan en internet. Según el articulista de CNN, Paxton K. Baker, los negros han sido privados de sus derechos durante siglos. Por lo que All Lives Matter ignora toda una historia.
También te puede interesar:
Negros también matan a negros
«Estoy tan convencido de que hay un grupo de personas que no creen en absoluto que las vidas negras importan. Ese grupo son los líderes nacionales e internacionales de los grupos Black Lives Matter», dijo un pastor negro.
Según su posición, los líderes del movimiento están en silencio con respecto a los «cientos de negros que son asesinados cada semana por otros negros en nuestro país».
La activista Nestride Yumga, también lo piensa. «En Chicago asesinan todos los días a algún niño negro, ¿dónde está ‘Black Lives Matter’ en Chicago?».
Una investigación del FBI que data 2015 descubrió que el 83% de los homicidios de personas negras fueron a manos de negros.
«Las vidas negras deberían importar en todas partes. No se necesita un policía blanco para matar a una persona negra, para que su vida importe», dijo Yumga.
«Cuando los negros matan a los negros, no salen y hacen esta basura. Yo soy afroamericana y no estoy oprimida», son algunas de sus opiniones.
¿La vida importa?
No obstante, hay personas que defienden su causa incluso si esto cuesta la vida de alguien. Una mujer de Indiana fue asesinada luego de una supuesta discusión con un grupo de partidarios de Black Lives Matter, dijo su familia.
La víctima, Jessica Doty Whitaker, de 24 años, caminaba con su prometido, José Ramírez, y otras dos personas cuando alguien en su grupo usó un insulto racial, informó Fox news.
Un grupo de extraños cercanos escuchó el comentario y se enfrentó al grupo de Whitaker. Ramírez alegó que el grupo gritó «Black Lives Matter», a lo que, según los informes, Whitaker u otra persona de su grupo respondió: «All Lives Matter».
Se produjo una breve discusión.Ramírez afirmó que ambas partes lograron resolver el problema antes de separarse.
Pero minutos después, alguien abrió fuego desde un puente cercanom acertando al cuerpo de Whitaker antes de huir.
«Subieron la colina y se fueron, pensamos, pero estaban sentados esperando a que pasáramos por debajo del puente y ahí fue cuando le dispararon», dijo Ramírez.
La policía no ha verificado de forma independiente si se produjo el supuesto argumento sobre «Black Lives Matter» o si el tiroteo fatal incluso estuvo relacionado con otra causa.
De ser cierto, la violencia en nombre de la lucha racial podría ocasionar asesinatos al mejor estilo de una guerra.
También te puede interesar:
¿Guerra racial?
Los movimientos políticos basados en llamamientos a la solidaridad racial y el antirracismo, dependen de una «cierta forma de hacer que el conocimiento histórico funcione dentro de la lucha política».
Así argumentó Foucault en Society Must Be Defended, un libro basado en una serie de conferencias sobre historicismo político.
Por historicismo político, Foucault se refería a una forma de ver el presente como una continuación de las luchas pasadas.
De hecho este filósofo fue uno de los primeros y más agudos analistas de la forma en que los movimientos políticos basados en la identidad apelan a la historia y encienden lo que él llamó «guerra racial».
El conflicto, no es entre el pasado y el presente. Más bien, es entre aquellos que desean reactivar conflictos pasados y aquellos que esperan escapar de la violencia de la historia.
El sociólogo Ali Meghji, de la Universidad de Cambridge, considera que la sociedad conmemora más a los esclavistas que a los colonizados y esclavizados. «Tenemos una visión del imperio como una fuerza del bien que llevó la democracia al resto del mundo supuestamente incivilizado», dijo.
El pasado es parte del presente. Las heridas parecen no sanar en medio de un panorama donde se aclaman y se coartan derechos de la ciudadanía.
