Este mundo está cada vez más conectado. La exposición de los seres humanos es más visible gracias al Internet y las redes sociales. A diario las personas se animan a mostrar sus mejores atributos, estilo de vida y sus cuerpos. Pero más allá de la apariencia física, la ciencia considera que hay otra característica que hace que los humanos luzcan más atractivos: la generosidad.
Dar y ser compasivo con otros puede hacer que las personas luzcan mucho mejor. Estas afirmaciones están presentes en tres nuevos estudios analizados por los expertos de The Conversation.
Tres estudios diferentes
En el primer estudio se tomó una muestra representativa de adultos mayores en Estados Unidos.
Este demostró que aquellos que se ofrecieron como voluntarios obtuvieron una mejor puntuación, mientras que los que no realizaron ningún tipo de ayuda al prójimo fueron vistos como “menos atractivo”
Esto, a pesar de que los participantes no sabían qué tipo de voluntariado había participado la persona.
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En el segundo estudio revelaron que los estudiantes que realizaron voluntariado y ayudaron a otros durante la secundaria, una vez que se convirtieron en adultos jóvenes fueron puntuados como “más guapos”.
Al igual que en el primer análisis, los entrevistados desconocían el tipo de labor social que efectuaron los individuos.
El último estudio que analizaron los especialistas recopiló datos de adolescentes de Wisconsin desde 1957 hasta el año 2011.
En esta publicación se descubrió que los jóvenes cuyas imágenes del anuario fueron calificadas como “más atractivas” por los evaluadores, tenían más posibilidades de donar dinero 40 años después.
En los tres experimentos se les pidió a los participantes que calificaran a las fotografías en una escala de “más atractivo” (números más altos) a “menos atractivo” (número más bajos).
Si bien la “belleza” está en el ojo del espectador, lo que hagas en la vida también suma o resta puntos a tu apariencia.
¿Hermosas y superficiales?
En el pasado otros estudios sugerían que las personas hermosas también eran superficiales y poco generosas.
La publicación es producto de la colaboración de Santiago Sánchez-Pages, que trabaja en las universidades de Barcelona y Edimburgo, y Enrique Turiegano, de la Universidad Autónoma de Madrid.
E indica que las personas con rostros más simétricos tienen menos posibilidad de cooperar y se centran más en sus propios intereses.
Los autores del estudio aclaran que:
“Como las personas con rostros simétricos tienden a ser más saludables y atractivas, también son más autosuficientes y tienen menos incentivos para cooperar y buscar ayuda de los demás”.
Por otra parte, hay otros señalamientos que insinúan que el ser “bonito” o “guapo” es una puerta clara para el éxito.
Además de mantener la apariencia, a pesar de que la persona no sea tan inteligente.
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Tener un rostro “puede ser una fortuna”, ya que los individuos más atractivos suelen ganar más dinero y tener mayores posibilidades de escalar a nivel empresarial.
Un estudio de graduados de MBA encontró que había una diferencia de entre el 10% y el 15% en los ingresos entre las personas más atractivas y las menos atractivas del grupo.
En número estos ascendía a unos 230.000 dólares (150.000 libras esterlinas) durante toda la vida.
En contra los estereotipos
Pese a esto, los nuevos hallazgos señalan que la humanidad está cambiando.
A su vez contradicen los mitos impuestos en películas como “Mean Girls” o “Legalmente rubia”, las cuales señalan que el atractivo físico es más importante que otra cosa.
Los estereotipos suelen estar muy arraigados en la sociedad, pero ¿qué son? son conocidos como la “Imagen o idea aceptada comúnmente por un grupo o sociedad con carácter inmutable”, según lo define la Real Academia Española (RAE).
Debido a esto, existen grandes estándares de lo que es conocido como “bonito” o “feo”. Tomando como “guapos” a aquellas personas que suelen asistir al gimnasio, tienen una figura esbelta, una sonrisa perfecta.
Estos estudios juegan un papel importante, ya que demuestran que hacer el bien y ayudar a otros resulta ser una cualidad que mejora no solo los rasgos físicos y sino que hace que sean vistos como mejores humanos.
