El yoga es una práctica capaz de transformar la vida de otros, no solo engloba el cuerpo sino también la mente. En un artículo de la Universidad de Harvard aseguran que esta antigua disciplina es cada vez más popular porque representa “un respiro” para personas que viven una vida “caótica” y ocupada.
Para Kenelma Salgado, instructora de yoga y maestra reiki, enfatiza que esta disciplina físico – mental fue “una luz”.
Comenta que ella estaba saliendo de una situación de salud complicada y los médicos le pidieron no realizar ningún deporte de alto impacto y luego de un sueño se topó con el yoga.
Realizó un diplomado por dos años y entendió que el yoga es más que posturas físicas. “Tuve una conexión muy rápida con esta disciplina. Cuando llegué al diplomado sabía muy poco y después quedé encantada. Ahora es parte de mí”, expresa.
Esta disciplina físico – mental suele ser recomendado por psicólogos y psiquiatras, ya que lo consideran una poderosa herramienta para combatir la ansiedad, la depresión e incluso el trastorno de bipolaridad.
Charlotte Walker, activista de salud mental, escritora y autora del blog sobre trastorno bipolar Purple Persuasion, le cuenta a la BBC que el yoga la ayudó a controlar su ansiedad y a sentirse más segura de sí.
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“En mi interior, siento una claridad que quiero mantener. Las situaciones de estrés ya no son tan estresantes. Ya no estoy tan abrumada por la ansiedad”, confiesa.
Fortalece el espíritu
La edad no importa en el yoga y tampoco hay prejuicios. Es un estilo de vida que profesa vivir en armonía.
Dianida Licet (57) confiesa que sufre depresión y producto de todo el estrés que estaba viviendo comenzó a experimentar ataques de pánico en las noches y le recomendaron el yoga.
YouTube es ahora su mayor aliado y buscó “para probar” “Yoga para principiantes”, una vez que inició no ha podido parar.
Ella ha notado cambios abismales en su cuerpo y actitud. “Desde que comencé a practicarlo no me siento tan deprimida, me siento más activa y que estoy viviendo un poco más feliz”, relata.
Licet enfatiza que la edad no es un impedimento para practicar y que recomienda con los “ojos cerrados” el yoga.
Además de los cambios físicos que está comenzando a experimentar también siente que su espíritu se va fortaleciendo. Piensa cualquier persona puede sufrir de alguna enfermedad mental y siempre es bueno busca herramientas para ayudar a superarlas.
Esta percepción concuerda con la instructora de Yoga, Génesis Salcedo, quien precisa que:
“El yoga transforma a las personas, partiendo por la autoexploración que en el camino se va concientizando, al iniciar todo es físico y poco a poco eso va cambiando”.
Agrega que una vez que la persona siente que está viviendo esa transformación y se va convirtiendo en un individuo más consciente es cuando el yoga ayuda para combatir cualquier patología mental, tanto el trastorno depresivo y ansiedad.
“Desde una primera clase de yoga que tomes el espíritu y el cuerpo la reconocerá y aunque en una primera clase el sistema mental no ande al mismo ritmo, el sistema anatómico y espiritual empezará a agradecerlo. Son sistemas brillantes y autónomos”, concluye.
Mejora el nivel cognitivo
Más allá de ser una herramienta de superación para las enfermedades de salud mental, el yoga también tiene otros beneficios.
Un estudio publicado en el 2017 destaca que con tan solo practicar esta disciplina 25 minutos al día, las personas pueden mejorar la capacidad de controlar patrones de pensamientos habituales y las respuestas emocionales.
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Por otro lado, también juega un papel importante en la alimentación, ¿Cómo?
Gracias a esta práctica los individuos toman consciencia de cómo reaccionan determinados productos en el organismo y tienen menos probabilidades de ser obesas, tal como revela un análisis del Centro de Investigación del Cáncer Fred Hutchinson.
Salgado comenta que según sus maestros, “El yoga es capaz de sanar cualquier lesión adquirida fuera de una clase de yoga porque nos ayuda a tranquilizar el cuerpo y la mente”.
