La era digital llegó para revolucionarlo todo y entre esas cosas están las relaciones. WhatsApp, Instagram y Facebook son redes sociales que han tomado un rol importante en la vida de esta generación and of course los smartphones son el medio ideal para lograr comunicarse con conocidos y desconocidos.
Cada vez son más las personas que se consideran “adictos” a estos aparatos tecnológicos. Y la verdad es que se han convertido en una herramienta importante en las relaciones amorosas. ¿La era digital hace que las relaciones sean más frágiles?
De esa pregunta puede derivar varias respuestas y a su vez opiniones divididas. Algunas personas creen que no es así y otras aseguran que es capaz de debilitar cualquier vínculo romántico.
La pedagoga Nora Bracho en una conversación con ABC aseguró que en la “era Whatsapp” las relaciones sí son más frágiles.
“El control permanente que permiten el WhatsApp, Twitter, o Instagram hace que los nativos digitales controlen a la pareja de una forma absoluta y donde se la somete a un ahogo total… Saben a qué hora se ha acostado, qué ha comido… esto ha provocado un completo y peligroso rediseño del concepto amor en todas las edades”, expresó.
La experta comunicó que el marketing se ha convertido en un detonante para las generaciones Millennials y Z, porque suelen tener la creencia de “que el amor todo lo puede” que “los polos opuestos se atraen” y tienden a confundir control con amor.
En la búsqueda de conocer la opinión diferentes opiniones. Conversamos con algunas personas sobre las redes sociales y las relaciones.
Love is in the air?
José Manuel Guzmán (24) piensa que las redes sociales no son ese monstruo que destruye relaciones al contrario cree que las fortalece.
Reconoce que es importante demostrarle a tu pareja lo mucho que te gusta y decirle al mundo lo bien que te sientes con ella, so las social media te permiten tal libertad.
-H: ¿Consideras que las redes sociales pueden debilitar las relaciones?
-JM: Yo opino que las redes pueden ayudar a fortalecer una relación, porque es una nueva forma de demostrarse amor y de gritarle «al mundo» que amas o que simplemente estás con esa persona especial. Mucha gente se queja de eso, pero como que se les olvida lo sabroso que es sentirse orgulloso de estar con alguien y querer que todos conozcan al motivo de su felicidad.
Las redes también se podrían considerar un foco de inseguridades. ¿Por qué? Por la existencia de las famosas “indirectas” y el hecho de compartir imágenes que puedan reflejar el estado de ánimo pueden ser considerados unos detonantes.
¿Inseguridad?
Es decir, para una parte de la población es más fácil expresar cómo se sienten por Twitter que escribírselo directamente a esa persona.
JoséMa, como suelen llamar a José Manuel Guzmán , confiesa que en algún momento sí sintió cierta inseguridad con respecto a su pareja y lo que subía en redes.
Con el tiempo entendió que cada persona es libre, que las social media son un reflejo de los pensamientos y que es tonto que eso te haga sentir fuera de lugar.
Frank Jove (23) siente afinidad con lo dicho por JoséMa. “Dudo que las redes sociales puedan debilitar una relación. Solo las veo como una herramienta para compartir cosas que nos gustan”.
“Todo siempre dependerá del contenido de las cosas que subas y creo que eso es lo que puede ocasionar un disgusto”, comenta.
Por otra parte, conversamos con Mileisa Torres (24) comunica que todo depende. “Si vives en pareja y esa persona usa MUCHO el teléfono o pública muchas cosas de pareja. Eso sí interferiría en la relación”.
¿Es válido coquetear?
El mundo digital les permite a muchas personas tener una vida en paralelo y esto da paso al coqueteo en línea. ¿Se podría considerar infidelidad coquetear con otros mientras tienes pareja?
“A veces uno se siente desatendido en las relaciones y es bonito sentirse halagado por otras personas. Es una forma de tomar las acciones en las redes sociales, todo lo que tu publicas tiene un impacto en alguien”, opina Régulo Medina (22).
H: So, ¿no consideras infidelidad hablar o coquetear por otros en las redes sociales?
R: En sí, no lo considero infidelidad porque coqueteo es coqueteo y a los seres humanos nos gusta sentirnos halagados. El problema está cuando pasa de un coqueteo y se empieza a ocultar y también mentir.
In fact, algunos datos arrojan que Tinder es una de las redes sociales que son una ventaja a la infidelidad.
En estudios recientes señalan que entre 18 al 25 % de las personas que eran activas en esta red social estaban comprometidos con una relación.
Una investigación publicada por Computers in Human Behavior entrevistó a 300 ciudadanos y 22% de los encuestados aseguraron tener pareja y entrar en Tinder para “conocer personas”.
¿Por qué usan Tinder?
¿Y existe una razón detrás de esto? Según el documento de Computers in Human Behavior sí: “Usan Tinder cuando viajan, usan Tinder para olvidarse de su ex, para aumentar sus habilidades sociales y de coqueteo, también por la presión social”.
Algunas personas suelen decir que la infidelidad es más común en estos tiempos que en años anteriores, pero en realidad muchos psicólogos coinciden que engañar a tu pareja depende, en gran medida, de la cantidad de tiempo que tengan juntos.
Datos revelaron que después de cuatro años es el pico de “se acabó el amor”, lo cierto es que hay un camino largo entre el coqueteo y la infidelidad, o ¿es más bien corto?
JoséMa expresa lo siguiente: “Considero que es normal. He escuchado y leído a gente decir que, ahora, eso de coquetear teniendo pareja pasa más que en la vieja escuela. Eso es obvio, porque hoy es más accesible con la Internet y la tecnología, ¿pero tú crees que tu mamá y tu papá, tu abuelo y tu abuela no le lanzaban un guiño, inocente pero coqueto, a un compañero de trabajo de vez en cuando? Transporta la tecnología que tenemos hoy a esa época, y verás que los niveles de flirteo serán iguales o superiores que los de hoy”.
Las redes sociales son herramienta y un trampolín para demostrar sentimientos y emociones y, aunque, a muchos le cueste reconocer por medio de los Smartphones se pueden fortalecer relaciones y también debilitarse.
