Es difícil creer que en medio de una pandemia algunas personas se encontraran con sus almas gemelas. El mundo está sumergido en problemas de diferentes índoles, pero el amor continúa siendo el único sentimiento capaz de aliviar las tormentas.
Si antes de la pandemia le hubieses preguntado a José Manuel Guzmán (25 años) que si buscaba el amor de sus días, tal vez solo hubiese dicho que “no”, pero la crisis del nuevo coronavirus lo empujó a encontrarse con su soul mate, una chica que él define como el centro de su nuevo universo.
Guzmán apartó su lado más reservado y se abrió al amor sin paracaídas. Flor González (24 años), su novia, cuenta que en Uruguay nunca decretaron una cuarentena estricta por lo que esto les permitió salir y conocerse un poco más.
“Además de estar preocupados por la situación también estábamos más atentos al otro, eventualmente nos fuimos acercando tanto que decidimos mudarnos juntos, ya que en el caso de que se decretará una cuarentena obligatoria no queríamos dejar de vernos”.
González cree que en medio del confinamiento muchas personas, al igual que ella, se han permitido abrirse más y mostrar sus sentimientos.
“Creo que es más probable que la gente encuentre el amor durante este tiempo que en otro”, expresó a CNN Yue Xu, copresentadora del conocido podcast Dateable.
“Debido a que tenemos este tiempo dedicado para encontrar el amor, no hay distracciones, no estás en un bar mirando a las personas que te rodean o mirando tu bebida. Todos están más presentes y son más conscientes de la forma en que se presentan a estas citas virtuales o de la vida real”, destacó Xu.
A veces, sin necesidad de buscar el amor, él solo te encuentra y esto fue lo que le sucedió a Yossimar Rodríguez (25 años) y a Eduardo Pinto (24 años).
Rodríguez confiesa que ella disfruta de la soledad y el hecho de vivir sola no le incomoda, pero que este chico llegó para cambiar su perspectiva del amor y la compañía.
“Plena. Esa es la palabra indicada, que va de la mano con la felicidad que me hace experimentar”, argumenta Yossimar.
Cuando inició la pandemia, siempre intentó cuidarse y no salir, nunca pensó que se enamoraría ni mucho menos iniciaría una relación con nadie. “Él me conquistó”, dice Rodríguez.
Antes de verse por primera vez, comenzaron a hablar por mensajes privados en Twitter y a medida que intercambiaban mensajes, él empezó a conquistarla. Le enviaba canciones de Doja Cat, una de sus artistas favoritas, e información que era de su interés.
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La atención de Eduardo le robó el corazón a Yossimar. Después de hablar por un tiempo, decidieron verse y la conexión que sintieron fue inmediata.
“Después no queríamos estar separados y ahora pasamos casi todo el tiempo juntos”, agrega.
Aunque todavía no han decidido vivir juntos, intentan no estar separados por un período largo.
“No vivimos juntos, pero sí pasamos varios días juntos (risas). Cocinamos, limpiamos y así. También nos metemos en nuestros teléfonos y nos pasamos memes, videos, nos reímos y somos perfectamente capaces de disfrutar del silencio”, confiesa.
Julie Krafchick, la otra copresentadora del podcast Dateable, aclara que la pandemia ha ayudado a aclarar la mente de los millennials y ha dejado de lado el miedo a fallar.
“La gente está empezando a sentir que es mejor fallar rápido que estar en este constante estado de equilibrio (…) Por ejemplo, despeguemos o terminemos”, lanza Krafchick.
La pandemia ha unido parejas, pero también ha separado a otras. Geraldine Montilla (25 años) y Reny Morales (25 años) estaban seguros que el 2020 sería su año de reencuentro. Todo estaba listo para volverse a ver, después de dos años separados, pero el destino tenía otros planes.
Días antes del viaje, en Venezuela decidieron cerrar las fronteras y los vuelos. “Cuando me enteré del cierre, solo pensé que serían solo dos o tres meses y luego se retomaría, nunca nos imaginamos que sería tanto tiempo”, declara Geraldine.
Considera que ha sido un “camino difícil”, sin embargo, todavía tienen esperanza en su relación y en el encuentro.
La crisis del coronavirus los ha hecho más conscientes de sus sentimientos y de esas ganas que tienen de estar juntos.
“En medio de todo esto que vivimos, sólo nos hemos dado cuenta que una vez que nos encontremos no queremos estar separados”, recalca.
El amor también puede ser sinónimo de paciencia y durante el año pasado les ha tocado ponerla en práctica. Agradecen que la tecnología los mantenga unidos de alguna manera.
“Hemos puesto en práctica muchas cosas. Videollamadas diarias, ver películas o series juntos, jugar y poner en marcha pequeños proyectos. Aunque hubo un momento en el que nos sentíamos desesperanzados, nuestro amor siempre encuentra la fuerza para seguir y confiar”, explica Montilla.
El COVID-19 les ha dejado innumerables lecciones a la humanidad. Quizá una de las más importantes es valorar a los seres amados que están alrededor.
