Las relaciones entre Irán y Estados Unidos no están atravesando su mejor momento, eso lo sabemos, pero hay otra preocupación presente: Los patrimonios culturales iraníes, ¿Por qué? Después del «ataque selectivo» que acabó con la vida de al general iraní Qasem Soleimani, el inquilino de la White House, Donald Trump sentenció que tenía 52 objetivos en la mira dentro del país de Medio Oriente y estos incluían algunos lugares importantes.
Para ser un poco más específicos esto fue lo que dijo el mandatario vía Twitter: «Si Irán ataca a cualquier estadounidense o cualquier patrimonio estadounidense, hemos focalizado 52 sitios, algunos de ellos de gran importancia para la cultura iraní».
Dentro de Irán hay 24 bienes certificados como Patrimonios de la Humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), por lo tanto tienen gran valor a nivel cultural, histórico y artístico.
Tiempo después del tweet de Trump, el secretario de Defensa de Estados Unidos, Mark Esper dijo en una entrevista para CNN que no tenían la intención de destruir ningún sitio propio de la cultura iraní. «Seguiremos las leyes del conflicto armado», enfatizó Esper.
En este artículo de Hypertexto mencionaremos los patrimonios más populares y su importancia en la historia de la humanidad.
Los años que duró la Segunda Guerra Mundial no solo dejó millones de muertos, sino que también se destruyeron innumerables bienes culturales.
Tomando en consideración lo sucedido durante esta guerra, en 1954, se llevó a cabo la Convención para la protección de los bienes culturales en caso de conflicto armado. Cuenta con un total de 115 Estados, los cuales se comprometieron a seguir cada parte del reglamento.
Y yes, en el documento una de las normas es no destruir los patrimonios culturales.
Aunque, Estados Unidos se retiró en el 2018 de la UNESCO, la directora general de la organización, Audrey Azoulay, les recordó a ambas naciones que forman parte de la Convención para la Protección del Patrimonio Mundial Cultural y Natural de 1972 y esto les obliga a:
«A no tomar deliberadamente ninguna medida que pueda causar daño, directa o indirectamente, al patrimonio cultural y natural (…) situado en el territorio de otros Estados Partes».
La directora general de la UNESCO en una reunión con el embajador iraní ante la organización, Ahmad Jalali, recalcó la necesidad de «proteger y preservar para las generaciones futuras» y expresó que Irán posee un rico patrimonio cultural y natural.
Es una ciudad y guarda grandes secretos históricos. Es considerado la Capital del imperio aqueménida y cuna del imperio persa.
Como dato curioso, el imperio aqueménida fue el primero y es el más importante del imperio persa. Es uno de los reinos más extensos en la historia del mundo. Su extensión territorial ocupó a países como Egipto, Israel, Palestina, Líbano, Turquía, Grecia, Chipre, Rusia, Afganistán, Uzbekistán, Turkmenistán, Irak, Irán y Siria.
Pasargada fue construida por Ciro II el Grande en la región de Fars, antigua Pars. En el 2004 fue inscrito como Patrimonio Cultural de la UNESCO.
De acuerdo a la organización «sus palacios y jardines, así como el mausoleo de Ciro, no sólo constituyen una muestra excepcional de la primera fase del arte y la arquitectura aqueménida, sino también un testimonio ejemplar de la civilización persa».
La ciudad tiene 160 hectáreas y adentro hay diversos sitios que resaltan la arquitectura y arte de aquellos tiempos. Un ejemplo son la terraza fortificada, aposentos reales y jardines.
El palacio de Golestán es uno de los patrimonios más valorados por los iraníes. Se encuentra localizado en la capital, Teherán. Su vasta representación artística es uno de sus mayores atractivos.
Es típica de la dinastía Kayar, la familia real iraní de origen turco que dominó Persia, como se conocía anteriormente Irán, desde 1785 hasta 1925.
Entró en la lista de los Patrimonios de la Humanidad en el 2013. Según la UNESCO es una representación de la modernización en esta nación y del impacto occidental del arte.
La mezquita aljama de Isfahám también llamada la Mezquita del Viernes de Isfahám es un ejemplo vivo de la evolución arquitectónica de este tipo de edificios en Irán.
Dicha edificación ha pasado por diferentes reconstrucciones, pero continúa manteniendo su esencia original.
La UNESCO incluyó esta mezquita a su lista de patrimonios en el año 2012. La organización expresa que «Situada en el centro histórico de Isfahán, la “Mezquita del Viernes” ilustra de manera sobresaliente la evolución de la arquitectura de mezquitas desde el año 841 d. de C. y a lo largo de doce siglos. Es el edificio más antiguo de su estilo en Irán y sirvió como prototipo para varias mezquitas posteriores construidas en Asia Central».
Irán también guarda patrimonios naturales de suma importancia para su población. Uno de ellos es el desierto de Lut. Fue nombrado bien natural por la UNESCO en el año 2016.
En ese entonces, sostuvieron que en el desierto de Lut se pueden observar «algunos de los más espectaculares relieves eólicos formados por crestas onduladas masivas (“yardangs”), así como vastos desiertos de piedra y un campo de dunas, que constituyen en su conjunto un ejemplo excepcional de procesos geológicos en curso de evolución».
Por supuesto, en esta lista no podría faltar Persépolis. La edificación comenzó en 521 a. C. debido a las órdenes de Darío I, quien fue el tercer rey de la dinastía aqueménida de Persia.
¿Cuándo la UNESCO incluyó a Persépolis en su lista? La ciudad fue inscrita en 1979 y la organización aseguró que desde su construcción, la edificación no ha modificado ni una sola vez.
En el complejo a su vez resaltan otros sitios como los Palacios las Cien Columnas y Apadana.
La UNESCO agregaba que «Este sitio arqueológico es único en su género por la cantidad y la calidad de los vestigios monumentales que posee».
El Jardín Persa comprende nueves jardines que están distribuidos en nueve provincias de Irán. Este data del siglo VI y está compuesto por murallas, naturaleza, edificios, pabellones, además de sistemas de irrigación sofisticados.
Este tipo de diseños inspiró jardines construidos en Europa e India.
La UNESCO recalcó que «el Jardín Persa se concibió como un símbolo del Edén y de los cuatro elementos zoroástricos: el cielo, la tierra, el agua y el mundo vegetal. Los jardines que forman el sitio datan de épocas diferentes –desde el siglo VI a.C.– y comprenden también edificios, pabellones, murallas y sistemas de regadío complejos».
A raíz de la declaración de Trump en Twitter surgió la campaña #IranianCulturalSites con la finalidad de mostrar los tesoros que tiene Irán para ofrecer.
Con esta etiqueta usuarios de distintas partes del mundo se encargaron de compartir y publicar imágenes de los sitios icónicos. Al mismo tiempo, sirve para exponer el rechazo a cualquier tipo de acción destructiva en estos sitios.
Por lo pronto, la relación de Irán y Estados Unidos continúa tensa y se desconoce cuáles serán los próximos pasos de los líderes de ambas naciones.
Mientras tanto, los ciudadanos solo esperan que se resguarden los patrimonios culturales y que Trump no rompa las reglas.