Encuestas demuestran que cada vez hay más millennials que se identifican con las políticas socialistas. Sienten afinidad con las premisas relacionadas a la igualdad de clases, educación y salud gratuita, protección a las minorías y la lucha en contra el cambio climático.
Una figura millennials que encaja con estos preceptos es Alexandria Ocasio-Cortez, la congresista estadounidense de origen latino y quien se considera abiertamente de izquierda. De hecho, en el último año se ha convertido en un personaje relevante y una piedra en el zapato de la administración de Donald Trump.
But, cuando se trata de personalidades “socialistas” no se puede quedar atrás Bernie Sanders. El político que con su discurso anti-capitalismo llegó a llenar mítines políticos con miles de jóvenes.
En cara a las elecciones de 2016 in the U.S., Bernie Sanders se convirtió en un contrincante fuerte para Hillary Clinton.
Incluso, en un momento muy breve, en agosto de 2015, se posicionó por delante de Clinton en las encuestas.
Sanders con su apariencia desaliñada y con su discurso orientado al socialismo logró que muchos jóvenes se identificaran con su ideología. ¿Qué planteaba en su campaña? Educación superior gratuita, una lucha contra el cambio climático, reforma del sistema judicial y migratoria, bajas de maternidad remuneradas y vacaciones.
Oh sure, en sus mítines emitía fuertes críticas sobre el sistema bancario estadounidense y la bolsa de Wall Street y prometió mayor control, además de ponerle fin a las rebajas fiscales a los ricos.
El “Tío Bernie”, como es apodado, se comprometió a no aceptar ni un dólar de grandes corporaciones y el dinero que recaudó durante su campaña provino de sus seguidores.
YouGov señala que los millennials son el único segmento de Estados Unidos que se identifica con las tendencias socialistas. Constataron que 36 % de los jóvenes menores de 30 años tenían una visión positiva de las políticas de izquierda.
However, en el documento destacan que no desean un socialismo como el de la Unión Soviética, sino políticas parecidas a las de países como Noruega y Suecia.
Ahora bien, lo que planteó Tío Bernie se asemeja más al estándar millennial. Esta generación persigue o aspira mejores oportunidades laborales que beneficien a una mayoría.
Son un grupo que está ligado a la era digital, pero también se preocupa por efectuar o realizar acciones que impacten a otros de forma positiva.
Asimismo, Sanders logró el apoyo de muchos jóvenes de origen latino, estos también se identificarán con sus ideales en particular aquellos en contra del racismo.
En agosto de 2015 en uno de sus mítines en Los Ángeles, miles de jóvenes coreaban en español “Sí se puede”.
Tío Bernie continúa con su visión de querer ser presidente y manifestó su deseo de ser el candidato demócrata para las elecciones del próximo año.
Para su suerte, encuestas recientes confirman que tanto los millennials como la generación Z en Estados Unidos continúa sintiendo afinidad con el socialismo.
YouGov en conjunto con Victims of Communism Memorial Foundation encuestaron a más de 2000 jóvenes y ratificaron que estos están perdiendo la fe en el capitalismo y creyendo en la corriente de izquierda.
Un panorama general indicaron que 50 % de los millennials y 51 % de la generación Z tienen una imagen desfavorable del capitalismo. Como dato curioso, estos porcentaje aumentaron de seis a ocho puntos con respecto al año anterior.
Casi la mitad de los encuestados afirmaron que han crecido en un país capitalista y sienten que como ha aumentado la desigualdad económica.
Aunque los jóvenes están destinados a hacerse mayores, esto es una clara señal que las ideas pueden perdurar en el tiempo y que, tal vez, los políticos deben trabajar en estrategias que estén dirigidas a esta población votante.
En sí, ¿qué es lo que plantea el socialismo? Según Karl Marx es una ideología política que se basa en la justa repartición de los bienes y una organización racional de la economía.
En este sentido, proponen la eliminación de la propiedad privada y de las clases sociales. Incluso, Marx en una de sus teorías aseguró que el comunismo sería una etapa de superación al capitalismo.
En una oportunidad, Winston Churchill, exprimer Ministro de Reino Unido, enfatizó que “El socialismo es la filosofía del fracaso, el credo a la ignorancia y la prédica a la envidia; su virtud inherente es la distribución igualitaria de la miseria”.
Y este pensamiento no está muy alejado de la realidad o es lo que la historia ha demostrado. Ejemplos palpables fue el fracaso de la Unión Soviética y Alemania Oriental.
Chile tiene semanas hundida en una profunda crisis social y política. Todo se derivó después del anuncio del aumento del pasaje de metro en Santiago de Chile.
Pese a que el presidente Sebastián Piñera informó que no se aplicaría el aumento, miles de jóvenes salieron a la calle para exigir un cambio en todo el país y también una nueva Constitución.
¿Qué piden? Aumento de las pensiones, del salario mínimo, una educación gratuita y mayor igualdad de derechos. Recientemente el mandatario aprobó estos acuerdos, sin embargo, las protestas continuaron.
Los jóvenes mantienen sus consignas y esperan una nueva Constitución que refleje algunas tendencias socialistas, asimismo esperan que se nacionalicen las minas, los servicios como la energía eléctrica y agua potable.
Por otro lado, las protestas han paralizado al país completo y Piñera no ha logrado recuperarse. In fact, las manifestaciones comienzan a rendir sus frutos y la voz de los jóvenes es cada vez más fuerte.
La oposición llegó a un acuerdo histórico con el gobierno y pronto Chile tendrá una nueva Constitución. Se pautó que la consulta ciudadana se realizará en abril del próximo año y tendrá dos preguntas:
La primera es si están de acuerdo o no con una nueva Carta Magna y la segunda es referente al órgano que debería encargarse de la redacción de este documento. La opción está orientada a una Convención Mixta Constitucional compuesto por parlamentarios y ciudadanos electos para esta función.
En febrero la revista The Economist escribió un artículo sobre las nuevas ideales de izquierda que cada vez más millennials se identifican con él. No solo es un patrón en Estados Unidos sino también en naciones como España.
En las últimas elecciones en el país europeo en el congreso las lideró un partido socialista y sí este es el Partido Socialista Obrero Español (PSOE).
Aunque no logró lo suficiente para gobernar solo, anunció su alianza con Podemos (la cuarta fuerza en el congreso) con la finalidad de trabajar en un gobierno progresista. Es decir, una suma de 120 más 38 escaños, lo necesario para ser mayoría.
En un estudio publicado por La Vanguardia, en marzo de 2019, plantearon que los jóvenes que iban a ejercer su voto por primera vez en España, se identificaron como “liberales” y “feministas”.
Y determinaron que la mayoría sentía afinidad con los partidos de tendencias izquierdistas, es decir, PSOE y Unidos Podemos.
Algunos líderes socialistas han logrado convencer a una masa de jóvenes que tiene sed de ver cambios profundos en la sociedad, que busca igualdad de derecho y justicia. De la misma manera que les permita acceder a una educación que no sea imposible de pagar y políticas que beneficien a una mayoría.